Asturias adopta nuevas medidas de contención frente al coronavirus con el cierre del ocio nocturno y la creación de registros
Los datos de coronavirus en Asturias han ido creciendo a lo largo de este mes, lo que ha llevado al gobierno regional a la toma de nuevas medidas para su contención. Recientemente se declaraba la alerta naranja en los municipios orientales de Parres, Cangas de Onís, Cabrales, Ribadesella y Llanes debido al alto riesgo de transmisión que allí existe. Una especie de “semáforo” con el que se pretende poner en “alerta a la ciudadanía”, ya que en estos concejos donde se concentra un mayor porcentaje de casos debido a la aglomeración de residentes y turistas. “Además”, señalan desde la Consejería de Salud, “hay un inadecuado cumplimiento de medidas de seguridad en ambientes relacionados con el ocio”.
Precisamente ha sido el sector que más miradas ha captado hasta el punto de acordar, junto al Ministerio de Sanidad, el cierre de discotecas y bares de copas en todo el territorio nacional, al que se le han sumado la limitación de horarios en el negocio de la restauración – sólo podrán estar abiertos hasta la una de la mañana -. No afecta la medida, eso sí, a los prostíbulos de la región que han seguido operando amparados en las diferentes licencias de apertura y para los que “aseguran” el Principado busca una solución.
Durante este mes también se han incrementando las medidas de seguridad en Principado con uso obligatorio de la mascarilla de forma continuada; la prohibición de fumar si no se respeta la distancia de seguridad de dos metros y la elaboración de un registro obligatorio de clientela en el sector de la belleza y el turismo. Éste afecta a todos los usuarios de alojamientos turísticos, peluquerías, centros de belleza, balearios o gimnasios, entre otros. Así, lo que se persigue, en que “de declararse un foco sea más sencillo el rastreo de las personas que han estado en contacto estrecho” por parte de la administración que será la única que tendrá acceso a estos datos. Los locales de restauración, por su parte, no tienen esta obligatoriedad pero sí que se les ha hecho la recomendación de hacer un registro.
De cara a septiembre la consejería de Salud del Gobierno asturiano ha anunciado que pondrá en funcionamiento la aplicación móvil de rastreo Radar COVID “coincidiendo con la puesta en marcha en el resto de comunidades autónomas”. En palabras del gobierno regional “la experiencia será muy valiosa para el desarrollo de una herramienta que complementará el actual sistema de vigilancia para la detección de contactos y establecer las cadenas de propagación”. Mientras, los casos de contagios en el Principado continúan avanzado. El último foco en ver la luz ha sido, precisamente, en el servicio de Oncología del Huca donde ya se han hecho los cambios pertinentes dentro del personal a fin de garantizar, sin retrasos, la atención a los pacientes.