Los ganaderos de Redes alegan contra el modelo de gestión para que no desaparezca su forma de vida

Los montes de los concejos de Sobrescobio y Caso siempre han sido eminentemente ganaderos, una actividad de un gran peso económico en estos concejos que en la actualidad está abocada a disminuir hasta casi su desaparición, según los propios ganaderos. El motivo las numerosas restricciones que hay para desarrollar este trabajo.

Unos montes que ahora forman parte del parque natural de Redes. Los cada día menos ganaderos que viven y trabajan a diario en Redes temen que las restricciones que se pretende implantar en el nuevo Instrumento de Gestión Integral del parque (IGI) termine con la ganadería. Como desde el Principado «en ningún momento se ha contado con nosotros», se han unido para presentar alegaciones con el único objetivo de «poder seguir viviendo y trabajando en este entorno que hemos cuidado mucho antes de que fuese un parque natural» explicaban.

Entre las alegaciones, prima la necesidad de los controles poblacional del lobo, apuntando a la participación en ellos de los cazadores locales. Además solicitan que no se consideren las vacas como elemento perturbador ya que su cifra cada es menor.

El documento, consensuado y presentado conjuntamente con UGT del Nalón, solicita en el segundo plazo de alegaciones un total de 27 modificaciones. Plantea la protección a la ganadería de este espacio natural y el impulso de su despegue turístico, pero siempre «contando con las personas que viven a diario en el mismo». No obstante, sus esperanzas son escasas, dado que tras revisarse la primera tanda de alegaciones -entre las que figuraban las de IU del Alto Nalón y PSOE de Caso- no se ha tenido en cuenta casi ninguna de ellas.

El secretario general de la UGT del Nalón, Dimas del Mazo, insistía ayer en sus alegaciones porque, «una vez más, como llevamos defendiendo años y años», para que se permitan los usos recreativos y actividades deportivas que no impliquen usos a motor, como puede ser el caso de la vela, el remo y la natación.

Entre las reclamaciones también se incluye la prohibición, sin excepciones, de presas y embalses, la autorización de mejora de pistas y caminos rurales por el bien ganadero, permisos de quemas de restos en monte y quemas controladas en las zonas de uso general y agropecuario.