Los propietarios del teatro Maxi apuestan por la venta del inmueble al consistorio

Los propietarios del cine Maxi, ubicado en Laviana, se han puesto en contacto con el ayuntamiento tras el envío de una providencia donde se informaba de las obras que debían realizar en el inmueble con el objetivo de garantizar la seguridad en el mismo. En ella se advertía que de no llevarlas a cabo serían ejecutadas de forma subsidiaria por el propio consistorio y se les entregaría posteriormente la factura a los propietarios.  Tras recibir la misiva familia Pesquera manifestó su interés por “vender este inmueble que goza de protección integral al ayuntamiento”. En  el pasado el consistorio mantuvo negociaciones para la compra de este edificio que nunca llegaron a buen puerto pues, en palabras de los propietarios, el “dinero ofrecido nos parecía insuficiente”. En este sentido el alcalde del concejo, Julio García, ha decidido coger el guante asegurando que están “dispuestos a sentarse a negociar, pero las obras no se pueden demorar y la familia debe afrontar las reparaciones que se exigen”.

En el informe técnico se establece un presupuesto de 78.000 euros para el total de las obras. Con carácter inmediato se deberán acometer aquellas reformas destinadas a eliminar elementos que puedan caer en la vía pública provocando daños materiales o personales pero, además, los propietarios deberán hacer frente a obras en el revestimiento de fachada del edificio, en la carpintería deteriorada, ventanas que se encuentran sin cristales; vegetación que se encuentra en puntos como canalones y desagües; y tejas que han desaparecido de los falsos aleros o elementos decorativos en los huecos de las ventanas ventanas. Ante las cifras los propietarios han manifestado su desacuerdo por “su elevado coste”.

El cine Maxi dejó de funcionar en mayo de 1988. Veinte años después y tras fracasar en numerosas ocasiones las negociaciones para la compra del inmueble por parte del consistorio, el que fuera una de las joyas arquitectónicas y culturales de Laviana, se encuentra en situación de “total abandono”. Motivo por el cual los vecinos han reclamado en numerosas ocasiones que se tomen “cartas en el asunto”.