Las bicicletas “no” son para el verano

Las bicicletas no son para el verano. Uno lo sabe cuando llega a Laviana y ve el entusiasmo y la algarabía de los más pequeños que no dudan en ponerse sobre las dos ruedas y hacer saltos imposibles para su pequeña estatura. Mientras tanto, los padres observan sus movimientos sentados en los bancos que rodean la pista de pumptrack en el parque de los Príncipes. Alguna pequeña caída, algún refregón, algún enfado porque las cosas no salen como deberían ser… pero sus caras sonrientes compensan la jornada. Eso, y que “llegan muertitos a casa y no hay guajes. Enseguida se echan a dormir”, comentan sus progenitores entre sonrisas.

Cada día, al atardecer, más de una treintena de niños se acercan a este circuito para deportes de inercia que es pionero en la cuenca del Nalón. Algunos todavía no se atreven a entrar en él mientras que otros han cogido eso de “surfear” y “saltar” con ganas y entusiasmo. Tanto, que en tan sólo un mes de vida el proyecto de BTT de Laviana cuenta con un nuevo pilar para su desarrollo: la Escuela L’Angariella Mud Skool.

Esteban García Rodríguez, de tan sólo seis años, es uno de sus alumnos. Él aún no se ha caído, “bueno, un poco”, que su madre le está mirando. “Ponemos conos, saltamos y hacemos relevos. Lo pasamos muy bien”. También los hay que ya tienen la destreza suficiente como para ir a rodar por las pistas en duro y no pierden la oportunidad de ello. Es el caso de Alejandro, su hermano, que en esos momentos está practicando su deporte favorito junto a los más mayores. “Desde que se inauguró el pumptrack hay muchísima vida en Laviana. Todos están volcados con el proyecto” señala María José Rodríguez Fernández. “Han hecho mucha promoción, los comercios, los locales hosteleros, todos están ayudando a los chavales en cosas como la financiación de las camisetas”, apunta Alfonso García Coto.

Pumptrack infantil de Pola de Laviana.
Pumptrack infantil de Pola de Laviana.

Los chicos se dividen en tres grupos que, salvo en el caso de los más pequeños donde si influye la edad, miden la destreza al manillar. Borja Canella y Marcos González, son los jóvenes monitores que les enseñan esta disciplina. Hablan de la actividad con entusiasmo. Les encanta y se nota porque como ellos mismos dicen aludiendo al refrán “si encuentras un trabajo que te guste nunca trabajaras”. Ellos están encantados aunque confiesan, que durante este mes, “no han tenido tiempo para mucho más”. Además, es necesario destacar que junto con el Consejo de la Infancia y los deportistas del municipio, estos dos jóvenes se involucraron desde el principio con el proyecto. No en vano, fueron los artífices de la ruta en duro por el monte Carrio que comenzaron a realizar con entusiasmo y que es, a día de hoy, un referente en este mundillo. “A nosotros nos conocen por organizar la San Silvestre en duro que, a pesar de las dificultades que supone la fecha, en dos años ha sumado 150 participantes”. Una ruta que ahora utilizan los chavales y que ellos fueron preparando de manera manual, eliminando obstáculos o construyendo canalizaciones a modo de desagües, entre otras cosas. Ahora, a la vez que continúan con el mantenimiento de la misma, abren la que será la segunda ruta.

“Si hay algo que tenemos que destacar es que los padres, los vecinos, y los propios negocios de la zona están volcados en este proyecto” señalan. “Nos han ayudado con los maillots y nos han dejado claro que para cualquier cosa que necesitemos podemos contar con ellos”.  De hecho, la sociedad lavianesa está tan involucrada que no son pocos los que les paran por la calle y les dicen “oye, para lo que sea eh”.

Terminan las clases y aún quedan una veintena de niños jugando en el parque con sus bicicletas y monopatines. Empezamos a ver como alguno que antes miraba tímidamente hacia el circuito se atreve a dar sus primeros pasos dentro de él. Van con un poco de miedo, para que lo vamos a negar. Despacito y con calma, enseguida se empiezan a envalentonar y hacen sus primeras “olas”. Con todo esto, no extraña que al llegar a casa alguno necesite curar sus heridas. Son los gajes del oficio.

Al caer la noche un grupo de mujeres mayores se acerca hasta el lugar. “Está esto lleno de vida y mira que hores son”. Mientras hablan animadamente con Borja y Marcos, alguna de ellas se propone para entrar en el circuito. La más aventurera, una jovencita de 91 años, me señala: “Apuntame ahí neña, que mañana empiezo”.

Unicef se vuelca con elogios hacia el proyecto de BTT

Unicef se ha hecho eco también de la iniciativa tomada en el concejo lavianés al que elogia por haber sido en numerosas ocasiones “pionero en el trabajo con la infancia”. Así, destaca entre otras la creación en 2007 del primer Consejo Municipal de la Infancia y la Adolescencia de Asturias, lo que le valió el premio José Lorca a la Promoción y Defensa de los Derechos de la Infancia.

BTT Laviana02

“Tan solo una década después” aseguran desde el organismo, “la idea surgida en un órgano municipal de participación infantil se ha convertido en un proyecto absolutamente innovador que aspira a mejorar la calidad de vida de los habitantes poniendo en valor los recursos turísticos y paisajísticos y uniendo, en torno al proyecto, a alcalde, grupos políticos, asociaciones y representantes del mundo de la bici” sin perder de vista a los verdaderos artífices de esta idea “que han estado presentes durante la redacción del proyecto y en las mesas de trabajo que se han llevado a cabo”.

La página web recoge así la iniciativa surgida en Laviana al que dedica un extenso reportaje para finalizar deshaciéndose en elogios ante el proyecto. “Si planificar una ciudad significa mejorar los espacios urbanos colocando las cosas correctas en el lugar apropiado,  el municipio asturiano parece haber dado con la fórmula: no sólo escuchar a los niños y jóvenes sino hacerles partícipes y corresponsales de la puesta en marcha de sus propuestas”, destaca. Para finalizar afirmando que “el resultado es una iniciativa innovadora, sostenible, transformadora, saludable y divertida que incide positivamente en toda la comunidad”.