San Martín pone en marcha una estrategia para la promoción de la salud y la prevención

La actuación se integra en un convenio suscrito en la FEMP y el Ministerio de Sanidad

El Ayuntamiento de San Martín del Rey Aurelio ha acordado adherirse al convenio suscrito entre la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y el Ministerio de Sanidad para implementar en el ámbito local una estrategia de promoción de la salud y la prevención dirigida a la población de municipio.

El acuerdo, avalado por el pleno, plantea el desarrollo progresivo de intervenciones identificadas como buenas prácticas dirigidas a promocionar la salud, prevenir las enfermedades, las lesiones y la discapacidad, actuando de manera integral durante el curso de la vida de las personas sobre factores como la actividad física, la alimentación, el tabaco, el alcohol o el bienestar emocional, al objeto de ganar años de calidad de vida en el tiempo.

“Al mismo tiempo que defendemos un sistema nacional de salud universal y de calidad con buenas instalaciones y servicios para los pacientes, entendemos que también debemos trabajar desde lo público en la prevención y el fomento de hábitos saludables, y en este contexto se enmarca esta iniciativa que ahora ponemos en marcha”, justificó la concejala de Servicios Sociales, Guadalupe Casanova.

Para echar a andar esta iniciativa, ya se ha constituido la mesa intersectorial, integrada por el propio Ayuntamiento, la Mancomunidad del Nalón, a través del Servicio de Prevención en Drogodependencias y Salud, el Consejo de Salud Sotrondio-Blimea, asociaciones vecinales y colectivos de mayores y educativos. Al mismo tiempo, ha comenzado a elaborarse un mapa de los recursos comunitarios que se divulgarán a la población, junto con información y recomendaciones para incentivar entre la ciudadanía un estilo de vida saludable.

Por sectores, las acciones de esta estrategia irán dirigidas a la población infantil, mujeres embarazadas y madres en periodo de lactancia, y población adulta. Respecto a los mayores de 70 años, se prevé el desarrollo de planes de seguimiento individualizados para la mejora de la salud y de prevención de la fragilidad, entendida como una situación de mayor vulnerabilidad y de riesgo para la discapacidad y la dependencia. La finalidad no es otra que conseguir el mayor nivel de autonomía el máximo de tiempo posible.