Entrevista a Javier Fernández, Presidente del Principado de Asturias

“Seguramente la prórroga dure 2 años, y va a ser muy duro”

Javier Fernández (Mieres, 1948) lleva un año y medio al frente del Principado de Asturias y ya se tiene que enfrentar a su primera prórroga presupuestaria. Una situación financiera a la que se ha visto abocado tras la retirada de los apoyos de UPyD e Izquierda Unida. Será difícil pero no imposible, Fernández asegura que ni él ni su equipo de gobierno dejarán de buscar lo mejor para los asturianos.

¿Está Asturias preparada para encarar una prórroga presupuestaria?

La prórroga presupuestaria es un problema serio, un problema muy serio. Y es menos un problema político para el gobierno, que lo es, que un problema económico y social para Asturias y para los asturianos, que serán los más perjudicados por el regateo de los cuatro partidos en la oposición a los presupuestos, una irresponsabilidad a sabiendas de la situación socioeconómica de Asturias. Con los problemas que tiene Asturias necesitaba contar con ese presupuesto, contar con toda la capacidad inversora posible. Estamos en un tiempo de urgencias en el que renunciar a un solo euro de los fondos públicos es una frivolidad. Y ante tamaña irresponsabilidad, a mi Gobierno le toca ejercer justo lo contrario: la responsabilidad. Así que vamos a gobernar con los presupuestos prorrogados. Seguramente la prórroga dure dos años, y va a ser muy duro porque, insisto, aunque el perjudicado políticamente sea el Gobierno, los perjudicados económicamente serán los ciudadanos.

¿Intentará el PSOE buscar entre la oposición, a lo largo de 2014, los apoyos que ahora no tiene para poder presentar unos presupuestos en el segundo semestre de 2014 o para no repetir prórroga en 2015?

Si tuviera alguna opción de formular otras cuentas con posibilidades de ser aprobadas, lo haría. Pero es pura retórica política. Lo que voy a hacer es, con toda humildad pero con toda tenacidad, seguir gobernando; y llevar todas las iniciativas que le corresponden al Gobierno a la Cámara e intentar buscar acuerdos para sacarlas adelante con seria disposición al diálogo y al consenso, como siempre he tenido mal que les pese y nieguen algunos. Porque el actual escenario lo exige, exige buscar y apostar fuerte por el entendimiento. Ahora bien, es obligación del Parlamento, de los grupos políticos que lo conforman, controlar y orientar al gobierno. Si tienen la tentación, que es posible que la tengan, de forzar un gobierno cameral, lo que les digo es que planteen una moción de censura. Los votos necesarios para sacarla adelante los tienen.

¿Qué falló en las negociaciones presupuestarias entre el resto de partidos políticos y la FSA primero y en el grupo socialista de la Junta después?

Lo que existe en Asturias ahora mismo es un planteamiento puramente electoral. Foro, PP, IU y UPyD están, a más de un año de las elecciones, en pleno proceso electoral. He buscado el acuerdo por todas las fórmulas posibles. Pero las pretensiones fiscales planteadas por Izquierda Unida eran excesivas y no habría bastado con lograr sólo el apoyo de sus cinco diputados. UPyD atiende exclusivamente a lo que se le diga desde Madrid. Y el resto de partidos del arco parlamentario, la derecha dividida, están justo en la posición opuesta, es decir, en bajar los impuestos. Con la actual composición del Parlamento, las dificultades son obvias.

¿Se esperaba el alejamiento y la ruptura de posiciones de IU y UPyD? ¿Alguna vez valoró la posibilidad de conseguir el apoyo de los partidos de derechas (Foro Asturias y Partido Popular) para estas cuentas?

Esperaba la seriedad y la responsabilidad que este asunto merecía. Lo que ocurre es que, repito, lo que IU y UPyD han impugnado no es el presupuesto del Gobierno del Principado sino otra serie de cosas. Con respecto al Partido Popular, sus posiciones son muy diferentes a las nuestras, sobre todo en el aspecto fiscal. Lo que su presidenta nos presentó fue una propuesta que evidenciaba claramente que pretendía una ruptura. Nos envió un planteamiento retórico de negociación con una bajada absoluta de impuestos, un planteamiento fiscal inasumible y la privatización de empresas que están dando beneficios. Era más un refugio para aparentar una negociación que un intento de abrirla. En cuanto a Foro, con todo respeto a sus votantes, el resumen es que no hay con quien tratar porque son puro populismo.

¿Considera que un mal presupuesto es mejor que la mejor de las prórrogas?

Considero que el presupuesto que mi Gobierno presentó y defendió es el mejor presupuesto posible para 2014. Y que la prórroga es el peor de los escenarios posibles y que tendrá consecuencias reales sobre la vida de los asturianos, que impedirá exprimir los recursos disponibles para luchar contra el paro y la recesión.

¿La prórroga le obligará a llevar a cabo cambios en su gobierno?

Este Gobierno seguirá gobernando con las dificultades obvias de una prórroga presupuestaria, con los créditos extraordinarios vinculados a ellas y con las iniciativas políticas que consideremos oportunas. No veo por qué he de hacer cambios en un Gobierno que, en el peor momento conocido desde el punto de vista económico, está desarrollando con empeño y dedicación su cometido, que está defendiendo los servicios públicos de calidad en Asturias, que está tratando de poner en marcha todas las políticas necesarias y posibles para la reactivación y para la lucha contra el desempleo.

¿La deuda pública se incrementará con la prórroga más de lo previsto?

No, las previsiones de deuda no se incrementarán respecto a lo previsto en el Proyecto de Presupuestos para 2014.

Estamos en las cuencas mineras. ¿Da el gobierno regional por perdidos los fondos mineros sin gastar? ¿Y el resto? ¿Qué va a pasar con obras ya empezadas como el soterramiento de Feve en Langreo?

El Gobierno que presido ha realizado siempre y seguirá realizando una firme apuesta en defensa de los fondos mineros, más cuando se trata de inversiones esenciales para la reactivación de nuestras comarcas mineras que han sido negociadas y ratificadas por el Ejecutivo central. Esta apuesta se refleja también en el esfuerzo presupuestario que está haciendo el Principado para continuar con las obras del soterramiento de Langreo. A pesar de la falta de fondos que deberían ser aportados por el Estado, el Gobierno regional no ha paralizado la obra y confía en que pueda concluirse en 2017.

¿Estamos asistiendo al fin de la minería pública y privada en Asturias?

El sector se encuentra en este momento en una encrucijada que, de evolucionar de forma desfavorable, puede llevarle a su práctica desaparición en particular en Asturias. El continuo desgaste al que se ha visto sometido se corona con la asfixia económica aplicada por el Gobierno del Partido Popular, retrasos en el pago de las ayudas que ha abocado a algunas de las principales empresas del sector a la situación concursal. Por tanto, el panorama es francamente sombrío para la minería del carbón tanto pública como privada, no sólo en Asturias sino en el conjunto de España. Mi Gobierno siempre ha mantenido una postura sólida en cuanto a la minería del carbón, defendiendo el concepto de reserva estratégica y propugnando un futuro para determinadas unidades de explotación más allá de 2018. Estamos defendiendo ante el Gobierno de la Nación todas aquellas iniciativas que permitan salir al sector de esta situación, combinando las ayudas a la explotación, mecanismos del sistema eléctrico, medidas de carácter social, ambiental y de diversificación. Y en este empeño insistiremos hasta el último momento, tratando de perfilar un futuro para el sector y para el conjunto de nuestras comarcas mineras.

¿Los asturianos tendrán que ir a coger el AVE a León?

Es evidente que el desarrollo económico de la región precisa de una infraestructura ferroviaria adecuada tanto para sus viajeros como para sus mercancías. El hecho de que el tren se pueda llamar AVE o no, pueda alcanzar una velocidad de 300 kilómetros por hora o de 250, es mucho menos importante que las ventajas logísticas que proporcionaría a las empresas y a los puertos de Gijón y Avilés una infraestructura ferroviaria preparada para tráfico mixto, viajeros y mercancías. Los asturianos queremos un tren lo más rápido y lo más confortable posible. Y queremos que se compartan esas vías con los tráficos de mercancías. Y, por supuesto, que las obras concluyan en el menor plazo. Permítame, eso sí, que no juegue a la vieja política de confundir una infraestructura con un proyecto político. Mire, es importante que se concluyan los trabajos en la Variante de Pajares, que entiendo está sometida a dificultades técnicas, y para ello lo que debemos exigir es que la implicación presupuestaria del Gobierno central con Asturias sea homogénea con la que practica en otras zonas de España.

Pronto, elecciones europeas. ¿Luchará la FSA para que haya algún asturiano en primera línea con opciones de representar a la región en el parlamento europeo?

Los intereses de Asturias estarán salvaguardados en el Parlamento Europeo a través del Grupo Socialista, con independencia de que haya en él eurodiputados asturianos o no. La tesis contraria, la que dice que si no hay representantes de la región la región estará huérfana en un foro de tanta importancia, no puedo asumirla desde el punto de vista político e intelectual. Pertenezco a una organización que defiende los intereses de los ciudadanos independientemente de su origen, condición o credo. Dicho lo anterior, espero que la próxima lista socialista incluya personas que, como están haciendo en la presente legislatura María Muñiz o Antonio Masip, tengan una relación estrecha con Asturias.