El sonido de las locomotoras

El Ecomuseo Minero de Samuño abrirá sus puertas el próximo 15 de junio con un recorrido turístico que comenzará en la estación de El Cadavíu
Tren minero del Ecomuseo Valle de Samuño

No por antes madrugar se llega más temprano. Ha tardado años pero ya está aquí. A partir del 15 de junio Langreo podrá disfrutar del Ecomuseo Minero del Samuño, y además, esta será una experiencia sin prisas puesto que tiene una duración prevista de dos horas. El trayecto incluirá, junto al viaje en el tren turístico, un recorrido por las instalaciones del pozu San Luis. Además, los turistas que saquen su entrada por la mañana podrán reservar el regreso al Cadavíu en alguno de los viajes de la tarde, con el objeto de que puedan quedarse a comer en La Nueva si quieren.

En principio, las entradas se fijaran en 10 euros para los adultos; cuatro para los niños mayores de cuatro años y cinco para los mayores de 65. La visita al Ecomuseo arrancará así en la estación habilitada en El Cadavíu y llevará a los visitantes hasta el pozu San Luis, en La Nueva. La nueva estación, con la estética heredada de la antigua instalación de Samuño, se convertirá en un punto de información para los visitantes. Tal y como explicó María Fernández, la alcaldesa de Langreo, la visita “arrancará con la proyección de un vídeo explicativo para acercar el equipamiento al visitante, que también podrá ver fotografía antiguas y un plano de lo que era el recorrido del primitivo tren minero”.

La parte inicial del recorrido termina en el pozu Samuño, donde los turistas podrán ver el túnel y la bocamina de La Trechona. A partir de ese punto el convoy seguirá su camino por el interior del Socavón Emilia, una galería que fue construida en 1904. El viaje termina en la primera planta del pozu San Luis, a unos 32 metros de profundidad. Desde allí, los visitantes accederán a la jaula para salir a la superficie. Ya en el exterior los visitantes podrán entrar en los diferentes edificios del Pozu San Luis.

La alcaldesa de Langreo destacó que “este es un proyecto vivo y, a medida que vayamos contando con vías de financiación, se irán recuperando otros elementos del pozo. Tampoco descartamos hacer recreaciones escenificadas o algún tipo de iniciativa similar en un futuro”.