Bienvenido Don Carnal

La cuenca del Nalón celebró su tradicional antroxu con desfiles que inundaron toda la comarca de diversión y color

La Cuenca del Nalón se vistió con sus mejores galas para el antroxu, porque al mal tiempo hay que ponerle buena cara. Y es que la crisis, con humor es menos, y además en estos tiempos el ingenio se convierte en un arma fundamental. Algo así debieron pensar aquellos que se disfrazaron entre los que destacaron disfraces tan originales como el de pingüino o el de fregonas vileda. Sobrescobio fue uno de los primeros en celebrar el antroxu con un baile en la asociación cultural La Panoya donde se repartieron premios. También contaron con el carnaval infantil que, para entrar en calor, repartió un chocolate con churros entre todos los participantes.

En Laviana, como vienen siendo habitual, el antroxu fue temático siendo el tema elegido para este año los “juguetes”. Así, discobares y cafeterías se adecuaron a la temática de esta edición para que cientos de personas disfrutaran de un día tan especial. También se celebró un torneo de fútbol sala para disfrazados y una carrera con disfraces.

En Caso el antroxu tuvo como principales protagonistas a los niños del colegio con un tema en concreto, la igualdad. Así los alumnos y los profesores eligieron profesiones que tradicionalmente se asignan a un sexo concreto e invirtieron los papeles.

Las tres localidades de San Martín del Rey Aurelio también contaron con sus particulares carnavales, celebrándose en L’Entrego un concurso en el que se podía participar en la categoría de infantil; adultos –por pareja e individual-. Sotrondio tuvo también un desfile de disfraces que salió de las escuelas del Serrallo y que recorrió las calles de Sotrondio; y en Blimea hubo un desfile infantil con un jurado ajeno a la Sociedad de Festejos de Blimea organizadora del evento en que todos los participantes recibieron un detalle.

Antoxu infantil de Sama, uno de los muchos carnavales que tuvieron lugar en el valle

En Langreo el desfile comenzó en La Felguera y terminó en Sama. En el hubo una gran participación, como viene siendo habitual en este antroxu, en el que los trajes grupales destacaron por su originalidad como fue el caso del grupo de los pingüinos, las fregonas o una carroza con el coche de los Picapiedra y sus miembros perfectamente ataviados al estilo de la popular serie de dibujos animados