EDES, el valor de los discapacitados
La asociación lavianesa Emilio Barbón entregó su galardón anual a la Fundación Edes, de Tapia de Casariego. El jurado otorgó este premio, que celebra su 16 edición, a esta entidad formada por la unión de personas con discapacidad psíquica, familias y profesionales.
El acto, celebrado en el Cidan, en Pola de Laviana y presidido por Adrián Barbón, presidente del Principado, se convirtió en una oportunidad de visibilizar a las personas con discapacidad que residen en el mundo rural. Comenzó esta reivindicación Julio García, alcalde de Laviana, quien se refirió a Edes como «esa fundación humilde que sigue manteniendo la ilusión y trabajando por mejorar la situación de cada persona, cada una con sus capacidades y su integración social y laboral en el mundo rural». José Vicente Barbón respaldó la idea y apuntó que «es un proyecto de inclusión que ha logrado dar empleo digno a personas con discapacidad».
Fue José Antonio García, actual presidente de Edes, quien se dirigió al presidente del Principado para reclamarle «una discriminación en positivo para la ruralidad, ya que se la está penalizando en las convocatorias a ayudas», y constató que «necesitamos buscar constantemente financiación para que el proyecto sobreviva y poder luchar por la empleabilidad de las personas con discapacidad». «Precisamos apoyo en el día a día para las personas que viven en los pueblos, especialmente a las que tienen una discapacidad», remarcó.
Por su parte, Adrián Barbón recordó en su intervención la figura de Emilio Barbón y valoró el trabajo de la fundación tapiega precisando que «no hay mayor libertad para un discapacitado que disfrutar de la vida y tener la independencia que da un puesto de trabajo».