Seis veranos sin Brañagallones
La empresa adjudicataria del parador finaliza su contrato este año por lo que se abren nuevas posibilidades de gestión
Nada más y nada menos que seis años son los que lleva el parador de Brañagallones, ubicado en Caso, sin actividad. Los problemas surgieron tras las discrepancias que existieron entre la actual empresa adjudicataria de su gestión y su propietario, el Principado de Asturias. Este exigía a la empresa una serie de arreglos en el tejado y el sistema eléctrico, que se dañó como consecuencia de las fuertes nevadas. A finales de este año termina la adjudicación y desde el consistorio esperan que se encuentre un modelo de gestión que permita a la instalación estar abierta durante buena parte del año.
No han sido pocos los empresarios que han visto en la zona un punto turístico de interés para desarrollar sus actividades sin embargo, hasta el momento, la cesión administrativa del Principado hacía que no se pudieran valorar otras opciones. Uno de los proyectos de mayor relevancia fue el que presentó la Federación de Montaña, que pretende hacer del parador un albergue como el existente en los Picos de Europa. Para ello se cambiaría la concepción de las habitación que serían sustituidas por camas de litera, lo que proporcionaría una mayor capacidad de alojamiento, entorno a las cincuenta personas. Los precios, al igual que en los Picos de Europa, serían populares y tendrían descuentos para los federados.
El parador de Brañagallones se encuentra en un marco privilegiado, por lo espectacular de la zona y porque desde este enclave salen diferentes rutas de montaña. Durante el invierno se pueden hacer salidas con raquetas o esquí de fondo y durante el resto del año, además de las rutas se pueden hacer avistamientos de aves y otros animales.