“Intentamos dar servicios a la carta que se adapten a las necesidades de nuestros vecinos”

Marcelino Martínez, alcalde de Sobrescobio.

Tras las pasadas elecciones municipales Marcelino Martínez volvió a ser reelegido como alcalde del municipio coyán. De los proyectos que verán la luz durante esta legislatura, el camino andado y el camino que queda por andar habla en esta entrevista para LA CUENCA DEL NALÓN.

– ¿Cuáles serán os pilares fundamentales sobre los que asentará esta nueva legislatura?

-Seguiremos en la misma línea de fijar población y empleo. Aunque esto último es lo más difícil lo seguiremos intentando a través del polígono de Comillera o de nuevas empresas que se vayan generando en el lugar. Además estamos haciendo una apuesta importante por mejorar las comunicación, introducir un internet de calidad, y dar unos servicios a la carta que se adapten a las necesidades de los vecinos y sobre todo de los más mayores: fisioterapeuta, podología, taxi para ir al médico…

-¿Qué proyectos verán la luz durante esta legislatura?

– Este año pondremos la escuela infantil en marcha que es una instalación muy necesaria para fijar población. Por otra parte está el acceso a Soto de Agues desde Rioseco, que aunque en un principio tuvo polémica es un proyecto importante para el concejo.

– La pérdida de población en el valle del Nalón es una constante y ésta se siente aún más en las zonas rurales. Sin embargo las estadísticas son más halagüeñas en el concejo de Sobrescobio…

-Sí, Sobrescobio mantiene el nivel de población gracias a que se ha incrementado la tasa de natalidad. Por otro lado se intenta incentivar este crecimiento dotando al concejo de servicios que tendrían en las grandes urbes: un telecentro, centros sociales en los pueblos, dos bibliotecas, la escuela infantil que pondremos en marcha. Y no es de ahora, los gobiernos socialistas  anteriores siempre trabajaron en este sentido.  Por otra parte la ubicación del municipio es muy importante ya que, aunque estamos en la zona alta del Nalón, hay buena comunicación con carretera. Nos falta, eso sí, conseguir otros servicios que mejorarían la calidad de vida de los vecinos. Ahora mismo tenemos un proyecto a través de Telecable para que nos llegue la fibra óptica que es lo que nos está demandando gente joven que viene a vivir al concejo y que, incluso, quiere trabajar desde su casa. 

-Uno de los pilares fundamentales en Sobrescobio, junto a la ganadería, es el sector turístico. En los últimos tiempos, y a pesar de que en esta zona no se puede hablar de un turismo masificado, si que han surgido problemas. ¿Cómo buscar la armonía?

– El turismo y la ganadería, en esta zona, no pueden vivir el uno sin el otro. Hay un porcentaje muy grande de personas que viven de la ganadería y otro que vive del turismo, e incluso ganaderos que diversifican su actividad y están en los dos sectores. Las dos partes tienen que respetarse mutuamente. En el caso por ejemplo de los perros, yo sí que pediría al turista que fuera un poco más responsable y que conociera un poco la vida de los pueblos. No necesariamente un animal tiene que estar abandonado porque lo encuentren suelto. De todos modos, los casos que se han dando no dejan de ser anecdóticos y puntuales.

Marcelino Martínez, durante la entrevista.

– Hace unas semanas los ganaderos y los vecinos se manifestaron pidiendo medidas a la consejería por la problemática del lobo. Entiendo también que a este problema, se le pueden sumar restricciones que les afectan a la hora de ejercer su labor por encontrarse en parque natural. ¿Cómo se gestiona esto desde la administración local?

– Aquí, concretamente, los ganaderos no tiene muchas restricciones. Algún problema siempre hay, por cortar algo sin permiso que pueda traer problemas, pero no es algo que afecte mayoritariamente a los ganaderos por estar en zona natural. Quizás porque no tenemos grandes áreas restringidas como pueda suceder en otros lugares. Si hay, eso sí, el problema del lobo. Nosotros seguimos demandando ese plan del lobo que debería estar en vigor y que no está. Un plan anual donde hay una partida importante de lobos a abatir. El problema es que no se cumple ningún año y en ese sentido lo que tenemos que pedir a la consejería es que saque ese plan lo antes posible del cajón y que se cumpla.

– Una de las espinas del concejo continúa siendo la “industria” ¿Cuál es la situación actual de los polígonos y qué espera conseguir de cara a esta legislatura?

-Continuamos trabajando en el polígono de Comillera. En su día tuvimos vendidas todas las parcelas, pero por temas financieros de la empresa que las compró volvieron a manos del Ayuntamiento. Ahora mismo tenemos una parcela vendida y hay demandas de otras dos parcelas. Desde el gobierno no solo queremos centrarnos en  la ganadería y el turismo; también queremos potenciar el asentamiento de empresas que generen empleo.

-Sois el primer concejo de Asturias en tasas de reciclaje, el primer concejo del valle en introducir los cargadores para coches eléctricos… Hay una apuesta muy clara por el medioambiente. ¿Cómo están participando los vecinos y qué nuevos pasos se van a dar en este sentido?

-Hemos conseguido todo esto gracias al sentido común de la gente y a la concienciación. La población colabora, y mucho, en el tema del reciclaje. En cuanto a los cargadores, todo lo que sea innovación y nuevas tecnologías las queremos acercar a Sobrescobio.

– De todos los proyectos que tiene en mente el equipo de gobierno, ¿cuál es el que supone una mayor apuesta?

-Sin duda el proyecto de ordenación silvopastoral en los montes de utilidad pública. Hemos presentado este proyecto a fondos mineros y es, con 1.800.000 euros de presupuesto, el más ambicioso que se ha llevado a cabo en el concejo. En él se incluyen temas de ganadería – con la recuperación de nuevos pastizales para los ganaderos -; el turismo, la recuperación de zonas degradadas por la minería para el disfrute de los turistas, la creación del camping de Villamoréi. Por ejemplo, en la ruta del Alba hay una antigua mina de hierro y está presente un cargadero. Queremos que haya carteles que expliquen esa arqueología industrial, recuperar el antiguo camino que sube a la mina y panelar, – para que se sepa que son esas ruinas – la antigua casa de aseos. Además, en el proyecto, también tocamos temas como la recuperación del castaño y de los abrevaderos, así como la reforestación de algunas zonas. Si conseguimos llevar este proyecto adelante tendrá una gran repercusión en el municipio.