El Alto Aller se moviliza en defensa de su Residencia
Vecinos de Felechosa y el Alto Aller organizaron una concentración frente a la Residencia del Montepío en apoyo y defensa de este proyecto social. Bajo el lema “condenen a los culpables, no castiguen al pueblo”, la sociedad civil de la zona hicieron público su oposición a cualquier decisión que pudiera significar un peligro a su continuidad, generadora hoy de casi un centenar de empleos directos, dando servicio no solo a las 175 personas mayores residentes, y sus familias, sino a cientos de personas que participan de sus actividades culturales y deportivas programadas en régimen de comunidad abierta.
Los vecinos, que habían mantenido una reunión previa con el presidente del Montepío, Juan José González Pulgar, en la que pusieron en evidencia su “inquietud”, temen que un cúmulo de decisiones “injustas” derivadas del “Caso Hulla”, puedan terminar castigando a un proyecto que, después de cinco años de dificultades empresariales (pérdida de 2,8 millones de euros desde junio de 2012 a diciembre de 2015), ha logrado remontar la crisis y dificultades de todo tipo hasta alcanzar por fin cifras de viabilidad (30.000 euros de beneficio en 2016), empleo (de 60 a 92 puestos) y actividad.
Una de las paradojas es que, pese a la “injusta demonización que ha sufrido este proyecto por la presunta acción cometida por personas concretas durante su obra”, este Residencia es una de los pocos proyectos empresariales de los fondos mineros que ha logrado remontar la crisis, con el compromiso explícito del Montepío por mantener la actividad, confirmado por el propio presidente de la Mutualidad, quien agradeció personalmente el gesto y apoyo de los vecinos. A esa concentración se sumó también el secretario general del SOMA –socio protector del Montepío-, José Luis Alperi.
En un comunicado leído durante la concentración, el pueblo avisa: “Vamos a defender el empleo y actividad de este proyecto porque su inversión con fondos mineros no fue un regalo, fue una compensación para paliar el cierre de minas”