Asturias en la vanguardia médica contra el coronavirus

Bajo el abrigo de la consejería de Ciencia, Innovación y Universidad y con la unión de la iniciativa público-privada el Principado ha conseguido sacar adelante dos proyectos sanitarios de gran importancia. El primero de ellos fue el desarrollo de un casco de ventilación no invasivo que sirve para insuflar aire con presión positiva en pacientes, permitiendo dar asistencia “ a un mayor número de enfermos y contribuyendo a evitar que personas afectadas por el covid-19 pasen a una fase de mayor gravedad que requiera de intubación”. El dispositivo de ventilación puede ser utilizado como casco o con otro tipo de interfaces como la mascarilla. En su fabricación, realizada en gran parte con piezas en impresión 3D, han participado cerca de una veintena de empresas asturianas contando también con el asesoramiento de Alberto Medina, médico de la UCI Pedriática del HUCA quién ha supervisado todo el proceso.  El “engranaje” ha corrido a cargo de los centros de investigación e innovación de ArcelorMittal, Idonial y Thyssenkrupp.

Por otra parte se han enviado a Liberia y República Dominicana los primeros prototipos experimentales de respirador con el objetivo de que puedan ser utilizados en los países de destino. Aún no ha recibido la homologación por parte de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, algo imprescindible para su uso médico en España.

El segundo proyecto puesto en marcha ha sido la fabricación de pantallas protectoras en 3D cuyas características técnicas se publicarán para que se puedan imprimir libremente. La pantalla forma parte de los equipos de protección individual en los que se ha venido trabajando desde el principio de la pandemia. El equipo, que fue probado de forma experimental por trabajadores del HUCA ya cuenta con la pertinente homologación.

Sanitarios de atención primaria en el Centro de Salud de Sama, guardando un minuto de silencio por los compañeros víctimas del Covid-19.

El consejero de Salud pide prudencia ante la baja inmunidad entre la población asturiana

El consejero de salud, Pablo Fernández Muñiz, apeló este mes a la prudencia ante la baja inmunidad de la población asturiana frente al virus covid-19. A mediados de mes se daban a conocer los estudios preliminares de seroprevalencia en el estado español cifrando en 1,8 % la tasa de personas que han desarrollado anticuerpos frente al nuevo coronavirus. Debido a la cifra tan baja que se maneja en el Principado el consejero ha instado a “mantener el virus” a raya con la adopción, en los próximos meses, de medidas de protección y prevención tales como guardar la distancia de seguridad de dos metros entre personas y el uso de mascarillas y de mamparas en lugares de atención al público.

En lo refrente a la atención ordinaria, el titular de sanidad aseguró que “ésta se irá recuperando de manera progresiva y controlada, evaluando continuamente la situación epidemiológica y ofreciendo la máxima calidad en la atención y seguridad, tanto en pacientes como en profesionales”. Por otra parte señaló que será necesario “reorganizar el personal sanitario de atención primaria y hospitalaria, fomentando también el trabajo telemático, la atención telefónica y el seguimiento domiciliario así como el triaje y el doble circuito en todos los dispositivos asistenciales, según la evolución de la enfermedad”. Fernández Muñiz también destacó que la atención psicológica será una “cuestión esencial” motivo por el cual el Sespa ha fortalecido este servicio con intervenciones entre la población general así como en personas directamente afectadas por la enfermedad a la vez que ha reforzado el apoyo especializado a familias y profesionales.