El Langreo regresa a Segunda B

El U.P.L  completa la temporada entra en el bombo para participar en la Copa de la Rey
Jugadores y aficionados del UP Langreo celebrando el ascenso a Segunda B. Foto: www.futbolasturiano.es
Jugadores y aficionados del UP Langreo celebrando el ascenso a Segunda B. Foto: www.futbolasturiano.es

Vientos del pueblo me llevan/vientos del pueblo me arrastran/me esparcen el corazón/y me aventan la garganta. Casualmente el pasado 24 de junio, el U.P. Langreo hizo suyos estos versos del poeta Miguel Hernández, oriundo de Orihuela (su rival en la fase final del playoff), para constatar, aupado por cerca de 4.000 aficionados que se arremolinaron en el Ganzábal, su ascenso a la Segunda División B. Porque aunque el gol en el minuto 63 se lo anotaron a Omar Sampedro, el balón fue arrastrado por todos.

Al equipo liderado por Hernán Pérez le bastaba el 1-0 para consumar el ascenso (tres años después de su descenso a Tercera) ya que, en Orihuela habían perdido por la mínima (2-1), consiguiendo el siempre ansiado gol fuera de casa. El técnico del equipo langreano asegura que “sabíamos desde un primer momento que nos enfrentábamos a un rival muy difícil,; pero el gol en Alicante nos hizo volver a casa muy esperanzados”. Antes de esta última fase el U.P.L dejó en el camino al Alondras C.F, de Pontevedra y al Náxara C.D, de La Rioja.

Pérez, que al cierre de esta edición aún no ha confirmado su continuidad, mencionó la palabra ‘éxito’ para hacer balance de temporada. De hecho, además del ascenso a 2ªB, el equipo fue campeón de la Copa Federación y estará en el bombo de la Copa del Rey.  Este último periplo, tras disputar un partido ‘anecdótico’ el pasado 29 de junio contra el Colunga (a quien venció por 8-0). El encuentro se disputó tras resolver el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) un recurso del club del Oriente, a quien el 27 de marzo, tras negarse, supuestamente, a cambiar su equipación, el Juez Único de Competición de la Federación de Fútbol del Principado de Asturias les dio el partido por perdido.