El primer minipunto limpio itinerante para los pueblos de Langreo llega a Trapa tras recoger más de 40 kilos de residuos en La Braña

Los contenedores separados para restos de origen domésticos empiezan su segundo periodo de prueba antes de empezar a rotar por toda la zona rural del concejo

El primer minipunto limpio itinerante para el reciclaje de residuos domésticos en localidades de la zona rural de Langreo acabó la semana pasada su periodo de prueba en La Braña (Tuilla) y está ya instalado en Trapa (Lada) para pasar otro mes de ensayos. A partir de entonces, el remolque adaptado para la gestión de los restos originados en los hogares rotará cada quince días por los núcleos del concejo.

Minipunto limpio itinerante en La Trapa.

Durante su estancia en La Braña, los vecinos depositaron en el minipunto los siguientes residuos hasta sumar más de 40 kilos de aparatos y productos desechados:

  • 18 fluorescentes
  • 7 kilogramos de pilas
  • 3 kilogramos de restos de café
  • 5 litros de aceite de cocina usado
  • Más de 9 kilogramos de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (raae o pequeños electrodomésticos9
  • 15 cedés
  • 7 tarros de pinturas y disolventes.

«Son cantidades modestas, porque estamos hablando de un solo pueblo. Pero estamos satisfechos con ellas y la empresa que gestiona el minipunto cree son un éxito rotundo porque el sistema permite a los vecinos desprenderse de forma cómoda y respetuosa con el medio ambiente de este tipo de residuos. Esperamos que sea una fórmula que vaya a más y se consolide», señala el concejal de Medio Ambiente, Javier Álvarez.

Con la puesta en marcha del servicio para la zona rural, el Ayuntamiento espera conseguir mejoras en la tasa total de reciclaje del concejo y alcanzar el objetivo de tratar el 50% de los residuos en los próximos años, tal y como marca la legislación europea. «Más allá de eso, es justo que los pueblos tengan las mismas oportunidades de ser entornos limpios que los distritos más poblados», añade el concejal.

En los tres minipuntos de la zona urbana se recuperaron el año pasado 271 kilos de cápsulas de café usadas, 80 kilos de fluorescentes, 125 kilos de bombillas, 87,5 kilos de corchos, 110,8 kilos de cartuchos para impresoras, 200 kilos de cedés y deuvedés, 544,4 kilos de pilas y baterías de dispositivos electrónicos y 216,90 kilos de otros pequeños artículos. En total, 1.654,3 kilos, un 11% más de lo recuperado en 2019.