Tanes navegable, Rioseco no

«No era lo que se esperaba». Así de tajante se muestran los hosteleros de Redes ante un futuro que se muestra condicionado por las restricciones en el uso de los embalses. Cortafuegos que, bajo su criterio, impedirán el ansiado despegue del turismo en este enclave asturiano.

Embalse de Tanes.

Pese al esfuerzo de los hosteleros y de los propios ayuntamientos, las restricciones han pesado más que los posibles beneficios embargando de desilusión a los vecinos de la zona. Y es que, solo Tanes, podrá ser usado por embarcaciones sin motor – siempre y cuando estás tengan la pertinente autorización – y no será en  ningún caso apto para el baño. El pantano de Sobrescobio, por contra, se queda sin ningún tipo de uso ya que los “informes técnicos desaconsejan el uso de este espacio donde se concentra el abastecimiento de agua a una gran parte de la región”.

«Ni bañarnos podemos», exclamaba un vecino de Tanes que recordaba que hace años sí se podía disfrutar de estas aguas. «De guajes íbamos donde la iglesia y nos bañábamos, incluso había mucha gente que venía de otros pueblos para disfrutar de ello», añade. Los hosteleros están desilusionados tras la decisión. «Tenemos la sensación de que se ha jugado con nosotros, nos han marcado unas expectativas que no van a cumplir. Era importante para la comarca poder ofertar algo atractivo para los turistas y nos hemos quedado a medias», sostienen.

En este nuevo borrador las embarcaciones sin motor -vela, pedales, piraguas- podrán navegar en el pantano de Tanes, un máximo de 42, de forma simultánea. Y se permitirán competiciones deportivas. La continuidad de la prohibición para el uso lúdico del pantano de Rioseco, que en los años 80 era una zona habitual de baños y donde se podían ver piraguas y lanchas hinchables, propiciará que se reclamen compensaciones. Eso es lo que reclama el Ayuntamiento de Sobrescobio tras las últimas informaciones.