El sanatorio Adaro impulsa la terapia acuatica a través de un curso internacional que se impartió en Langreo

Participantes en la terapia acuática impartida en el Sanatorio Adaro

El sanatorio Adaro lleva varios años impartiendo en su área de terapia acuática un revolucionario método que ayuda a los pacientes a mantener su equilibrio de forma segura después de haber sufrido patologías como ictus, esclerosis múltiples, parkinson… se trata del  denominado método Halliwick. Más de un centenar de pacientes se han beneficiado del mismo en los últimos años a través de su implantación de forma grupal, por lo que el responsable del Servicio de Terapia Acuática del Adaro que imparte esta técnica, Hugo Raúl Castellanos, impulsó un curso internacional sobre el mismo que se desarrolló en Langreo y que buscó poner en conocimiento de los profesionales estas técnicas y que sean implantadas en los centros hospitalarios.

El curso contó con la participación de Johan Lambeck, uno de los principales referentes mundiales del método Halliwick, quien fue el encargado de formar a los asistentes al curso. «Este sistema se utiliza con cualquier paciente que tenga algún problema de movimiento, ya sea derivado del aparato locomotor, del sistema neurológico o de la combinación de ambos. La parte básica es controlar el equilibrio y eso es más fácil en el agua porque nos da un margen de maniobra y reacción mayor», indicó el profesor holandés.

Castellanos, remarcó, por su parte que el método Halliwick «se conoce poco y por eso es muy importante la labor divulgativa. En el Adaro llevamos dos años trabajando con la terapia acuática a nivel grupal, pero creíamos que era necesario formar a profesionales para trabajar en un nivel más amplio».

Los primeros resultados de esta iniciativa no se hicieron esperar, Concepción Saavedra Rielo, directora de Atención Sanitaria y Salud Pública del área VIII, expresó la intención del hospital de Riaño de avanzar en la implantación de este tipo de servicio, para mejorar la prestación de la rehabilitación de los pacientes neurológicos. «Siempre hemos tenido una colaboración con el Sanatorio Adaro en ese tipo de rehabilitación. La mayoría de nuestros pacientes, generalmente aquellos que han sufrido accidentes cerebrovasculares y que necesitan una recuperación posterior, son trasladados al Adaro y ahora esta terapia va a ser una parte muy importante en ese proceso».

Un curso que logó reunir en Langreo a 30 profesionales de Suiza, Italia, Portugal y diferentes puntos de España ligados al ámbito de la medicina, la fisioterapia, la psicopedagogía, la educación física y la terapia ocupacional.