Villa, la historia viva del sindicalismo, pasa a la reserva
El que fuera durante 36 años secretario general del SOMA-FITAG-UGT deja su cargo “por motivos de salud”. Su sucesor será elegido a mediados de mayo.
Pilló a todos por sorpresa (o no tanto) e hizo correr ríos de tinta. Es la noticia del mes de abril por excelencia en las cuencas mineras y, posiblemente, una de las noticias del año: La marcha de José Ángel Fernández Villa del sindicalismo activo por “motivos de salud”.. El ya ex-secretario general del SOMA-FITAG-UGT es, oficialmente ya, parte de la historia del movimiento minero. Fernández Villa, que suma tantos adeptos como detractores, tantos odios como amores, dijo adiós a su responsabilidad sindical en una rueda de prensa que tuvo lugar en la Casa del Pueblo de Mieres.
Con la dimisión de Villa, la centenaria organización fundada por Manuel Llaneza, entre en un periodo de incertidumbre que podría ver la luz al final del túnel los días 17 y 18 de mayo, cuando está convocado el congreso para elegir a su sucesor. Ya se escuchan nombres. El que más resuena es el del sierense Julio Carretero que, durante los últimos años, ha sido estrecho colaborador de Villa aunque siempre en un segundo plano. Carretero fue expulsado del PSOE en 2010 tras enfrentarse a la Federación Socialista Asturiana (FSA) durante la pugna abierta por suceder al por entonces dimitido alcalde de Siero, Juan José Corrales.
Habrá que esperar a mediados de mayo para saber el nombre del que sustituye al que muchos consideran como “insustituible”.
Fernández Villa nacido en Tuilla en enero de 1943, en 1979 fue designado secretario general del SOMA-UGT. En 1978 fue miembro de la Comisión Ejecutiva Regional de la Federación Socialista de Asturias. Entre 1979 y 1993 fue miembro de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE. En 1993 preside el Instituto para la Formación, Investigación, Documentación y Estudios Sociales (Infide), uno de los proyectos impulsados por el SOMA en el entorno sociopolítico de las cuencas mineras.
Senador por Asturias entre 1999 y 2003. Diputado de la Junta General del Principado de Asturias entre 1983 hasta mayo de 2007 de forma ininterrumpida.
Tuvo un papel fundamental dentro de las huelgas mineras de la década de los ochenta en Asturias y fue uno de los protagonistas del encierro en el Pozu Barredo, en las navidades de 1991.