Riesgo de cierre para el refugio de Brañagallones
El refugio de Brañagallones (Caso) parece abocado al cierre. Las obras de reparación del refugio de montaña siguen sin ejecutarse, lo que pone en peligro su apertura, anunciada para este mes de marzo de 2024. Según el calendario oficial. El Principado había prometido ejecutar el pasado otoño las obras de reparación, pero con el invierno a punto de terminar, la actuación aún no ha comenzado.
El tejado del edificio está en muy malas condiciones y todo el complejo se alimenta de viejos generadores de gasoil que, además de gastar mucho, se estropean continuamente. Pese a la reparación efectuada por la Federación de Montaña el pasado mes de diciembre, el resto de la obra sigue sin ejecutarse.
El objetivo de las obras es una reparación integral del sistema de tejado, impermeabilización y estructura soporte; así como la mejora de ventilaciones, chimeneas y la instalación de ventanas tipo «velux». Además, se pretende que el refugio funcione con energías renovables. El equipamiento cuenta con una partida de 300.000 euros de fondos europeos para definir las fuentes de energía que empleará para hacerlo más eficiente.
El refugio de Brañagallones es propiedad del Principado y está gestionado por la Federación de Montaña del Principado de Asturias. Su presidenta, Tensi Carmona, confirmó que el Gobierno regional ya ha elaborado el proyecto de obra «y estamos a la espera de que se comience a trabajar».