Joaquín Pajarón llenó con su “fiesta” de práu

Olor a fiesta, a verbena, a juerga. Eso es lo que se respiraba el último sábado de agosto en el Prau de La Chalana donde los asistentes pudieron disfrutar, bajo el alumbrado de postes, de una tradicional fiesta de prau. La productora A Mansalva demostró, con su buen hacer, que la cultura es segura. Distancias de seguridad, protocolos de entrada y salida e incluso la utilización de una aplicación para poder pedir en barra lo que se quisiera, que fue servido – eso sí, antes de comenzar el espectáculo – en los asientos.

Joaquín Pajarón, que de Pajarón dice solo “tiene el apellido”, subió al escenario para deleitar a un público que se mostró entregado e identificado con su monólogo “En Demasía, prau Festival”. El humorista recurrió a lo cotidiano: a esas quedadas en el poste de la luz que como bien es sabido se diferencian perfectamente de los otros treinta del prau. De las dificultades de pedir en barra, de la aparición de tu madre “la moderna” que está “piripí” y baila ahí… “a lo loco, en demasía”. Y cómo no de las voces y los ruidos que “invaden” su cabeza:  “otro coche pa Tazones”.

Joaquín Pajarón escanciando en el ‘Demasía Prau Festival’ celebrado en La Chalana (Laviana).

Entre risas y chanzas fueron llegando las seis canciones típicas de las fiestas de práu donde no faltaron Los Berrones o José Luis Perales. Al escenario subió también Pablo Carrera, gaitero y productor de A Mansalva que interpretó la canción “Chalaneru”. Para acompañar cada tema se escanció un culete de sidra y se bailó un poco, sin moverse del sitio y sin perder el paso marcado por el propio Pajarón “piedra, teya, patada, paso”. El “Asturias”, de Víctor Manuel, fue el encargado de cerrar un acto del que todo el mundo salía con palabras de elogio y sonrisas. Fue, en definitiva, un estímulo para el valle y para los vecinos de Laviana que este año no pudieron celebrar el tradicional Descenso.