El Hospital Valle del Nalón cierra camas en verano lo que satura las urgencias

El hospital comarcal Valle del Nalón inicia el verano, un año más con recortes en la zona de hospitalización. Este año la propuesta de la gerencia de este centro hospitalario ha sido clausurar de forma temporal 60 camas y habilitar 8 camas que denominan «polivalentes».

Un cierre que en esta ocasión afecta a las plantas 1ºA y 3ºC, y aunque se realiza para paliar la época estival, desde la CSIF (Central Sindical Independiente de Funcionarios), su representante en la Junta de Personal Jesús Garcia Salazar  explicó que «prevemos que se mantendrá hasta el mes de noviembre como ya ocurrió el año pasado». Y criticó que dicho cierre «se realiza atendiendo a un único criterio el economicista, año tras año y no de la eficiencia que pretenden vendernos». Pero este representante sindical critica que «la gerencia lleva años haciendo hechos consumados sin contar con los órganos de representación de los trabajadores»

Todo parece indicar que el cierre de estas plantas, y sus respectivas camas, convence a la dirección. Así en 2014 se cerraron 50 camas, diez menos que en esta ocasión, y se confirmó que dicho cierre no había resultado perjudicial para la marcha normal del centro. Si bien desde el servicio de urgencias de este centro no se muestran de acuerdo con esta apreciación y aseguran que «siempre que hay menos camas terminamos saturados en urgencias y la tensión crece entre los pacientes y sus familias».

El propio personal de este servicio, como confirma García, están de acuerdo en señalar que «en Urgencias se llega a duplicar los boxes para intentar atender a todo el mundo pero no es un lugar donde se pueda garantizar  ni una calidad asistencial óptima, ni todas las comodidades para pacientes y familiares».Desde este servicio se recuerda que «no es un lugar para estar hospitalizado días». ya que este área de trabajo está en continuo movimiento, con casos muy variados.

Sin embargo, reconocen que «hace unos días atendimos a una paciente durante tres días, hospitalizada en Urgencias  hasta que se le asignó una cama». Garcia apostilla que «este tipo de situaciones no podemos permitirla porque están convirtiendo el servicio de Urgencias en una unidad de hospitalización, y eso es una situación preocupante».

Tanto el personal del propio centro hospitalario como los usuarios del mismos están acostumbrados a que en la época veraniega se produzca esta merma de camas. Una costumbre que sin embargo no dejan de criticar cada año, ya que consideran que  va en detrimento de la calidad asistencial del propio hospital. En este sentido aseguran que «como hay menos camas en ocasiones se adelantan algunas altas médicas».

Además recuerda que este cierre no tiene en cuanta las característica de la población de esta comarca con muchos pacientes con multipatalogias «crónicas» y una población envejecida que «no entiende de verano o invierno»